Los animales que transitan por las carreteras de la República Mexicana, a menudo suponen un gran riesgo para la circulación y llegan a provocar numerosos accidentes. Únicamente en la carretera costera de Yucatán, se registraron en los meses de octubre y diciembre de 2020, 949 ejemplares de fauna silvestre atropellada; y ni hablar de los accidentes que ocurren a diario generados por perros o gatos callejeros, ocho de cada 10 de estos animales terminan en situación de calle o atropellados. 

En la mayoría de los casos, estos accidentes sólo producen daños materiales en el vehículo, pero a veces la fatalidad llega a afectar a los ocupantes, que resultan heridos y necesitan ser hospitalizados, o, en el peor de los escenarios, fallecen. Entonces, cuando esto ocurre, ¿la responsabilidad es del conductor? ¿El seguro se hace cargo de los daños ocasionados?

De acuerdo con las leyes mexicanas, un animal es un bien. Y en caso de que un animal muera o sufra lesiones por un accidente de tránsito, no ocasionado por el mismo, se repara el daño conforme a las reglas del Código Civil Federal para la Responsabilidad Civil por Daños Causados a Terceros.

¿Qué pasa en el caso de haber chocado con una especie cinegética?

Cuando en el accidente se produce el atropello de una especie cinegética de caza mayor, como jabalíes, corzos, zorros y ciervos, la culpa del accidente es casi exclusiva de quien maneja, a menos que se demuestre que, en el mismo día, ha tenido lugar una cacería colectiva o, como mucho, que haya concluido doce horas antes del accidente, en cuyo caso será responsable el propietario del coto.

También se puede evadir la responsabilidad cuando la zona donde se ha producido el percance no disponga de la señalización específica que avisa del peligro de colisión con animales cinegéticos o cuando existan desperfectos en la valla de cerramiento. En ambos casos, el responsable es el titular de la vía, generalmente, la Administración Pública.

Para los casos en los que el conductor resulte responsable y para aquellos en los que la especie que se haya atropellado sea de caza menor (conejos, liebres o perdices), sólo se está cubierto si se cuenta una póliza a todo riesgo con cobertura de daños propios, que cubra la reparación del vehículo, aunque algunas aseguradoras han ampliado su Seguro de Auto con pólizas a terceros con la cobertura de daños por colisión con un animal o una especie cinegética de caza mayor. 

Los daños personales del automovilista están cubiertos por la garantía de seguro de Daños Materiales, que se puede contratar en una póliza a terceros, mientras que los demás ocupantes están cubiertos por el seguro obligatorio de Responsabilidad Civil.

¿Qué pasa en el caso de haber chocado con una especie doméstica?

Muchos accidentes de tráfico son ocasionados por animales domésticos (perros y gatos) que no van acompañados de su dueño o que están abandonados. En este tipo de atropellos, lo habitual es que existan sólo daños materiales, los cuales están cubiertos por las aseguradoras siempre y cuando tengas contratado un Seguro de Auto con Cobertura Amplia o una póliza a terceros con cobertura de daños por colisión con un animal. 

Cuando sea posible identificar al propietario del animal, la aseguradora podrá reclamarle a éste todos los gastos si en la póliza del afectado consta la cobertura de reclamación de daños, que está disponible desde la modalidad básica de terceros, y no se le imputará la responsabilidad del siniestro.

Es de suma importancia que si por alguna razón el conductor llega a atropellar a un perro o mascota, no se hagan arreglos con los terceros, es decir con los dueños del animal, ni asumir la responsabilidad; se debe contactar de inmediato al ajustador de la aseguradora con la que tenga contratado su Seguro de Auto para que acuda al lugar del siniestro y pueda brindar apoyo en los trámites debido. Dependiendo de la situación, también puede ser necesario que acuda también el abogado que pueda brindar asesoría legal. 

¿Qué pasa en el caso de haber chocado  tratando de esquivar un animal?

Cuando el conductor circula con su vehículo por la carretera y repentinamente aparece un animal, la primera reacción instintiva puede ser dar un volantazo para esquivarlo. Con esta acción quizá se consiga salvar la vida del animal, pero puede provocar daños mayores si el vehículo se sale de la carretera o golpea a otro vehículo que circulaba en ese momento por la vía.

Este hecho elimina toda la responsabilidad que tuviera el propietario del animal doméstico o el del del coto de caza en los casos de especies cinegéticas. Toda la culpa la tendría que absorber quien estaba conduciendo. 

En estos casos es el seguro de Responsabilidad Civil del que manejaba el que indemniza los daños a terceros. Los daños personales del conductor están asegurados con la cobertura Daños Materiales y los del vehículo sólo con pólizas a todo riesgo. Si no se tiene contratada alguna de estas coberturas, será el automovilista quien pague todos los gastos.

¿Qué hacer en caso de chocar con un animal?

1. Como en cualquier otro tipo de accidente de tráfico en el que las consecuencias permitan actuar, lo más importante es mantener la calma y proceder con seguridad. En caso de atropello a un animal en la vía, la ley obliga a detener el vehículo y comprobar su estado, así como prestar los primeros auxilios.
2. Antes de salir del vehículo, es importante apartarlo a un lado del camino para no obstaculizar a otros conductores y evitar nuevos incidentes. Después, y de preferencia, se debe señalizar la zona con los triángulos de emergencia y no olvidar ponerse el chaleco reflectante.
3. Una vez que se han adoptado estas medidas, hay que comprobar cómo ha sido el impacto en el animal: si está vivo o muerto, así como si se puede mover, si presenta alguna herida, etc. Conviene acercarse con suma precaución, ya que su instinto puede ser el de atacar para defenderse.
4. En el supuesto de que el animal haya fallecido por el golpe, se debe retirar de la carretera para no entorpecer la circulación y llamar a las autoridades inmediatamente, ya que ellas se encargan de registrar el siniestro y valorar la responsabilidad del mismo. 
5. Respecto a lo que hay que hacer, si el asegurado atropella a un animal y éste se encuentra con vida, pero no se puede mover, lo más sensato es avisar a un veterinario, así como a las autoridades. Por otro lado, también es posible llevar al animal atropellado a una clínica veterinaria que se encuentre cerca para que puedan valorar la situación y prestarle la atención necesaria.
6. Si el accidente se ha producido en una zona conocida, también es recomendable intentar localizar al propietario del animal.
7. En el caso de que el atropello se haya producido a una especie cinegética, se aconseja avisar cuanto antes a la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT).
8. Por norma general, estos accidentes causan graves daños materiales en el vehículo, por lo que también es preciso llamar al servicio de asistencia en carretera del Seguro del Auto con el que se tenga contratada la póliza. 

¿Cómo proteger tu auto con un Seguro de Auto en caso de haber chocado con algún animal?

No hay que olvidar que, para estar totalmente protegido ante una situación de estas características, conviene contar con un Seguro de Auto que cubra daños por atropello de animales.

Para ello siempre es recomendable comparar todas las opciones que ofrecen las diferentes aseguradoras del país, y para que la contratación de un seguro no se transforme en una tarea tediosa, Rastreator lo facilita. 

Tan sencillo como llenar un cuestionario con la información básica tanto del conductor como del modelo del auto, y Rastreator en cuestión de segundos brinda una comparación totalmente imparcial y gratuita, para que el que quiera contratarlo lo haga convencido y de acuerdo a sus necesidades y presupuesto. 

Contratar un Seguro de Auto ahora es una tarea fácil y no hay excusa para transitar desprotegido.