Entre algunas de las modificaciones que le puedes hacer a tu vehículo es el cambio de rines en las llantas. Sin embargo, ésta puede ser una tarea complicada, sobre todo si no se tienen las herramientas y experiencia adecuadas para ello. 

Además, esto puede ser difícil por factores como el tipo de llanta, el estado del neumático y las herramientas y equipo adecuados para poder quitar la llanta del rin en casa. A esto también se le suma el material del rin, ya que uno de aluminio puede ser más sencillo de quitar que el de acero debido al peso de la llanta.  

Por esto, a continuación, te contamos todo lo que necesitas saber para quitar la llanta de un rin, ya sea de aluminio, metal o si está dañado. 

1. Encuentra un lugar seguro para quitar la llanta del rin 

Esta tarea debes realizarla en una superficie plana para que el auto no ruede mientras cambias las llantas a mitad del camino. Puedes optar por utilizar piedras o bloques de hormigón para detener las llantas delanteras y traseras, lo que ayudará a mantener tu auto balanceado mientras realizas esta tarea.  

2. Levanta tu auto 

Pon el gato debajo del auto y cerca de la llanta que vas a cambiar. Procura que el gato esté en contacto con la parte metálica del marco para tener un mejor ajuste. De lo contrario, corres el riesgo de romper el plástico en esta parte al momento de levantar tu vehículo. 

3. Desinfla la llanta 

La forma más sencilla de desinflar la llanta es quitar el núcleo de la válvula. Es importante mencionar que si no sacas el vástago de la válvula y dejas el aire en la llanta cuando la pones para destalonar, la llanta puede explotar. Por ello y para evitar accidentes, lo mejor es asegurarte de desinflar la llanta por completo. 

4. Rompe el talón de la llanta 

Primero debes saber que el talón de la llanta es una parte muy importante, ya que ayuda a ajustar de forma segura el neumático y sella la presión del aire. Este se puede encontrar en cada llanta en el lado interior y exterior.  

Existen varias maneras en las que puedes romper el talón de la llanta, ya que puedes utilizar algunas herramientas especializadas, como la barra de palanca o gato de botella. Incluso, podrías combinar tus pies con los metales planos.  

Otra forma de romperlo es utilizando un Hi-jack, ya que sólo debes colocar la llanta y asegurarte de que el pie del gato esté lo más cerca posible de la llanta pero sin tocarla. Es posible que debas romper el talón en más de dos puntos del neumático. 

5. Retira la llanta vieja con los pies 

Deberás usar la fuerza de tus pies para poner el neumático y reducir el rasguño, aumentando el aplacamiento. Además, para evitar que la llanta se deslice, debes colocar la llanta sobre otras o sobre una alfombra.  

Durante este paso, es recomendable usar jabón o aceite alrededor de la llanta para lubricarla, ya que esto puede facilitar su extracción. Los expertos recomiendan utilizar jabón para lavar platos, ya que es más efectivo.  

6. Usa un destornillador o una barra de palanca para quitar el borde de la llanta 

Coloca la llanta y el rin planos en el suelo, después, coloca el extremo plano de una de las barras elevadas entre el neumático y la llanta. Tira de la barra hacia atrás, poniendola plana en el centro de la rueda para llevar la primera parte de la llanta hacia el exterior.  

Después, manten la barra en su lugar y fíjala para que no se salga; una vez que hayas terminado los lados de la llanta, voltéala y realiza los mismos pasos en el otro lado usando un destornillador o la misma barra. Finalmente, retira lentamente el neumático comenzando en un punto y continuando en ambas direcciones.  

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