Los seguros catastróficos no compensan desaparición del Fonden
- El Presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó la extinción del Fonden para tener mayores recursos con los cuales enfrentar la crisis sanitaria
- El bono y los seguros catastróficos, contratados por el gobierno para hacer frente a emergencias por desastres naturales, no son suficientes para compensar su desaparición
- Esto pone a México en vulnerabilidad ya que se enfrenta un mayor riesgo ante eventualidades y cambios en la liquidez del gobierno federal
Aunque para el 2022, el fideicomiso del Fondo de Desastres Naturales (Fonden) tendría un saldo de nueve mil 54 millones de pesos, en noviembre del 2020, el Presidente Andrés Manuel López Obrador ordenó su extinción para tener mayores recursos con los cuales enfrentar la crisis sanitaria.
Si bien la eliminación de este fideicomiso se oficializó este año, los recursos siguen presupuestándose en caso de alguna emergencia; sin embargo, ahora no cuentan con un fideicomiso o reglas de operación que marquen la pauta de cómo serán utilizados.
Un análisis de México Evalúa, centro de pensamiento y análisis que se enfoca en la evaluación y el monitoreo de la operación gubernamental, señaló que el bono y los seguros catastróficos, contratados por el gobierno para hacer frente a emergencias por desastres naturales, no son suficientes para compensar la desaparición del Fonden.
“Aunque así se clasifican, sabemos que no irán a este fondo ya disuelto: simplemente están ahí para reaccionar, en teoría, ante un desastre, sin reglas de operación o un esquema previsto de cómo y cuándo se van a asignar los recursos, ya no hay mecanismo de ahorro. La disponibilidad de recursos dependerá de que el programa presupuestario, para dicha finalidad, tenga recursos disponibles ese año”, indicó México Evalúa.
Esto, según dicho organismo, pone a México en vulnerabilidad ya que se enfrenta a un mayor riesgo ante eventualidades y cambios en la liquidez del gobierno federal, es decir, estos recursos podrían no materializarse en el supuesto suceso de que no alcance la meta de ingresos proyectada el año 2022 – de poco más de 7.08 billones de pesos– o bien, que el dinero se use para atender otras necesidades de gasto.
“El uso de bonos catastróficos y seguros no es algo nuevo. En realidad, desde el 2006 se utilizaban para complementar la cobertura del Fonden, es decir, que Hacienda cuente con un bono y seguro catastróficos no compensa la desaparición del fideicomiso, ni brinda cobertura extra que ya se tenía”, se indicó en el análisis.
La institución agregó que estos instrumentos no garantizan por completo la cobertura de todos los fenómenos naturales, pues el bono catastrófico sólo se solo se puede utilizar en acontecimientos como terremotos y huracanes de cierta magnitud.
“En caso de que se materialice algún siniestro, el seguro cubriría el riesgo de una reducción en los recursos presupuestales con motivo de la atención que se debe dar a los efectos ocasionados por los fenómenos naturales perturbadores”, describen los Criterios Generales de Política Económica para el ejercicio fiscal (CGPE).